jueves, 31 de diciembre de 2009

2009 El fin

EL 2009 no ha sido un año fácil en lo absoluto, al menos para mí no. Y tampoco para El Tren, que sin su conductor se quedó fuera de los rieles. Y este año se despide de la manera más cruel: manejaba yo bicicleta escuchando a full el Fabric de Craig Richards y de la nada siento que doy un volantín en el aire y no sé como aterrizo en la pista medio adolorido y veo que un carro de policias se estaciona automáticamente a mi lado y que un par de trabajadores de tránsito se acercan y me preguntan cómo estoy, yo no comprendía nada todavía, veía a lo lejos mi bicicleta y un poco de sangre de mi codo. El expreso me había arrollado y según los policias (que por primera vez les agradecí la preocupación y no los miré con cara de cerdos, aunque ni por eso van a dejar de serlo) había dado una aterrizada y un vuelco espectacular, creían que me había golpeado la cabeza o algo así, se les notaba bastante preocupados. Yo soy recio, y toda la vida he recibido todo tipo de golpes, así que me sentía cuasi normal, con un terrible ardor en la zona renal nada más. Para evitar trámites les dije que no sucedía nada, que maniobré mal (falso) y que si podía seguir caminando (mitad verdad, mitad mentira). Me preguntaron una y otra vez si estaba bien y siempre les dije que sí, que no había problema, me preocupe de que mi audifono siga en la oreja derecha y que el otro pronto esté en la izquiera nomás; es que yo funciono de esa manera, a baterias, a música. Llegué a la casa de mi tía empujando la bici y empezando a sentir los dolores más fuertemente, ardor, sobre todo. Mi tía se sorprendió enormenmente perr la despreocupé como a los puercos, que diga -y sólo por esta ocasión- los policias, dejé mi bici en su casa porque la pobre llevaba un día arreglada y ahora está maltrecha y llevarla de regreso iba a ser más tedioso y mientras caminaba por Bolognesi de regreso a casa me cagaba de risa sin poder creer todavía que no estaba muerto o herido gravemente. "La vida me ha creado para recibir grandes golpes", pensé, "Ni toneladas de droga me ha matado, y ahora, ni el carro, que antes tanto suplicaba que me choque y mate, ha podido hacerlo". "Dios me está dando la oportunidad de crear la revolución, es la única explicación". Ya en casa mi mamá llamó a mi viejo, quien se indigno, hizo un alboroto, casi le pega a los policias, me llevó a emergencia, pero todo fue en vano porque me salí de la sala, fumé un cigarro y pregunte en la bótica que podía untarme en vez de estar esperando como imbécil a que salga el retrógrado del médico (una media hora) y caso solucionado. Ahora sólo a descansar, en la noche hay que trabajar (no todos los años nuevos son diversión, la vida exige sacrificios) y esperar que todo salga bien. Y ahora sí, para lo que vine: escribirles:

"Y así es. Esto es una nueva vida. ¿Dónde estuve todos estos diez meses? La pregunta más frecuente de la gente, admirada. La respuesta es única, inevitable e invariable (para la gente, conocidos de máxima confianza o entendidos en el tema); en el lugar donde caen quienes no supieron hacer las cosas bien y todo se les fue de la mano. Algunos contentos con el regreso, otros, no. Agradecido a la mayoría porque una vez más demuestran que no me equivoqué cuando los defendía frente a los rigurosos tribunales del "Purgatorio" ayudándome con consejos y alcances bien intencionados. Yo los extrañé a todos, hubo mucha impotencia e ira, pero la supe sobrellevar para volver a estar acá y no guardar ningún tipo de resentimiento que bloquee mi crecimiento personal. Fue una experiencia más y nada más, aprendí mucho y conoci a personas que jamás pensé conocer y en un estado en el cual nunca imaginé, y sé que no las olvidaré, que estarán presentes en mi corazón siempre. Las mejores de las perspectivas, de mi parte, para este 2010, esoty seguro que será un nuevo año y se escribirá una nueva historia, una mejor historia, donde pueda redimir de una manera u otra mi pasado y comprometerme a ser mejor cada día más. Espero que lo mismo con ustedes, mis queridos lectores, orates y ociosos, letrados e iletrados, todos en general, la permanencia de este blog se la debo a ustedes, se lo agradezco mucho. Pasen un feliz año, y los que revientan cohetes métanse un par a mi nombre, lo mismo con los disparos o las caras felices ya que yo no puedo, jajaja."

Vibras y FELIZ AÑO!

domingo, 27 de diciembre de 2009

Delirium Tremens (Rekiem for a Girl)

-Yo estaba en la tienda arreglando lo que me corresponde, osea, la ropa,y veía unos politos bien chéveres que de hecho le quedarían perfecto a mi pequeña -a ella todo le queda perfecto, ¿vale?-, pero mi pequeña es pequeña pe, entonces yo supongo que es talla small pero no sé si le entrará porque de tamaño si corresponde pero tiene las boobies bien grandes , haha, ella saca pecho por mí, preciosa mi chatita, pero también es un problema porque cuando caminamos por la calle todos los obreros la sirean y a mí me da celos y no sé qué hacer, la cosa es que estaba indeciso, osea,por el tamaño de todas maneras le entra pero puede ser que por las boobies le ajuste, no quería preguntarle porque quería sorprenderla a mi chiqui, casi llamo a su mejor amiga -que me odia- para que me dé su talla pero ya qué importó: por ella gasto el doble, así que le compré small y medium por siacaso, es que es encantadora, amo cada gesto que hace y estoy encantado de ella, siempre me abraza y me dice que me quiere, es ¡ya no más ya! lo máximo, ese regalo es lo mínimo que le puedo dar, estoy ansioso por entregrárselo verla y que me apachurre y se contente con el obsequio, estar entre sus brazos es estar entre las nubes, pero voy a seguir así porque quiere que le compre una ciudad y que la llama "Regiopolis" y yo estoy dispuesto a adquirírsela, ya estoy juntando y todo...

Los doctores, al otro lado de la ventana, donde él no los ve, deciden:

-Está loquito -dice uno-: Pabellón 18.

-Pero es de los tranquilos, que esté en el 17, para que pueda leer, escribir y jugar naipes.

-Sí, merece un buen trato - añade una doctora.

-No sé qué impresión te llevas tú, Fiorella, pero este loquito es buena vibra.

-Sí, sí lo es, estará bien en el 17, es inofensivo, sólo que sufre de obsesión, una ilusión del pensaminento, además se ha destemporalizado y desespaciado, una lástima.

El ahora paciente sigue su monólogo, haciéndole apologías y loas a su amada que ya no existe para él. Mientras se crea todo lo que dice estará bien.Hay que tenerle paciencia, comprensión y cariño.

-Hasta ahora recuerdo cuando la vi bajando las escaleras -y sigue hablando cosas que sucedieron pero que no sucederán jamás y que no son más que incoherencias. Y así seguirá. Vaya, cómo es el destino, ¿no?. Grita, sonríe, salta, ni cuenta se da de que está solo en un cuento, su cuento. Pronto lo acogeran los doctores.

jueves, 24 de diciembre de 2009

Feliz Navidad...

Es sabido que a los drogos no les gusta la navidad y aunque yo no soy ya un drogo -eso no significa que olvide lo que he sido, lo que soy o lo que probablemente seré haha- les diré de todas formas que pasen unas felices fiestas, aunque para mí estas fechas no son muy gratas, son más bien, melancólicas, porque extraño mi niñez y me fastidia reubicarme en el tiempo y porque estaría a puertas de un aniversario -que yo mismo perdí (cada quien es dueño de sus actos, y por ende, de las consecuencias de estos), y que tal vez ya dejó de exisitir hace tiempo y sólo existe en mi minúscula y necia cabeza- para ya un año más practicamente, pero que se va a hacer... caballero nomás: aceptación, tolerancia, y humildad. Aun así, esta vez, la tercera como blogger, por primera vez les deseo que pasen unas bonitas fiestas, porque el hecho de que a mí me desagraden no signfica que les tenga que desagradar a ustedes también o que los tenga que karmear con mi espíritu navidño, así que no seamos egoístas y regalémosle una sonrisa a quienes nos quieren pasándola a su lado pues, si creen o no qué importa, pasenla bonito nomás, cumplan con el convencionalismo por lo menos. Hay que recordar que hay que pensar en el bienestar global y no el en personal, sólo así conseguiremos un mundo de paz y amor

Los sinceros deseos de su servidor, el vagabundo.

lunes, 21 de diciembre de 2009

domingo, 20 de diciembre de 2009

Combate de Abtao

Vaya parque en el que me vine a sentar. Y vaya canción que me toca escuchar. Creo que ya lo comprendí, debo agradecerle y ya dejar que la vida continue. Eso sí, muy agradecido.

"I want to thank yo for given me the bests days of my life"

Una pareja sentada en el gras, un grupo de jovencitas (ya estoy viejo) jugando y conversando en el grass, un ejecutivo leyendo su diario en una banca no muy lejana a la mía, abuelas caminando con sus diminutos nietos, niños en el columpio. Hay cosas que he hecho en este parque que ya ni me acordaba. Pero eso fue en el pasado, por lo tanto, quedan atrás, como simples anécdotas y experiencias de vida. Qué rico aire corre, es un alivio después de caminar tantas cuadras bajo un sol tan agobiante. Mejor sentirse melancólico a colérico, al menos así lo veo yo. La gente se ve tan feliz...tan libre... La vida es bella, aunque me cueste creerlo. Aunque sí, estoy seguro que lo es. Paz y amor, para toda la vida.

sábado, 19 de diciembre de 2009

Oro






Actualmente cotizado como oro para vuestro vagabundo. Coca Cola, café, y cigarrillos. Uffff!

Cosas del Trabajo

En mi trabajo (porque eso era después de todo) no pensé quedarme tanto tiempo, es mas, yo sólo pensé que me quedaría unos tres mesecitos y que de ahí renunciaría y, ya, chau. Ingresé circunstancialmente, casi -voluntariamente, más que todo porque estaba contra la espada y la pared; pero de haber sabido que me encontraría con un jefe como el que me encontré y con un sistema tan inteligente y astuto como en el que estuve... no hubiera ingresado nunca. Los primeros meses mi estadía fue ardua, los trabajos eran difícil tanto física como conductualmente, aunque tenía algunos privilegios a ciertas horas. Hasta ahora no entiendo con qué fin me retenían porque, en ese entonces, no cumplía con ninguna de las características para desempeñar con las labores que me vendrían en un futuro, es mas, ni intenciones tenía de desempeñarlas, ánimo en mí no había más que el de pasar el tiempo. Pero me retuvieron. Y aquí estoy. En un escalofón que sólo meses después imaginé algún día llegar (incluso me tentaba serlo), pero que tenía sus obstáculos puesto que llegar ahí significaba estar más tiempo ( y de nuevo el factor tiempo) del que yo suponía estar (o soportar). Ahora he pasado lo más difícil, me ha costado mucho trabajo, esfuerzo y sacrificio, haciendo tareas deplorables y hasta algunas que iban en contra de mis principios pero necesarias para el ascenso que he ido escalando y escalando y, como todo aquel que hace las cosas bien, me tocó lo que me corresponde, lo que anhelaba, y por eso quien estuvo antes que yo donde estoy, que estuvo sólo por mi ausencia en esta área, me envidia. Soy el brazo derecho de mis jefes y amigo en especial de uno en particular. Ya no es a mí a quien tienen que ordenar, sino soy yo quien da las indicaciones, eso sí, claro, sin revanchismo, existen los modales y no me gusta que la gente se sienta como en determinado moment me sentí yo: nada. No tengo ni porqué entrometerme con los trabajadores comunes -anque a veces, por mi dedicación y humildad, lo hago- , yo tengo que empincharmelas con los jefes de áreas, ellos sí que tienen que rendirme cuentas a mí de absolutamente todo; peor soy condescendiente y los dejo trabajar, no me gusta que me guarden rencor ni que la gente se distorcione sobre mi persona. Pero así como yo me les empincho, hay quienes se empinchan (y cuando lo hacen sálvese quien pueda) conmigo cuando las cosas salen mal: mis jefes. A ellos yo les debo tooodas las cuentas, incluso en las que no tengo ni pelo que ver, etcéteras veces me he comido pleitos ajenos guardando el debido respeto; es que hay que aplicar lo aprendido. Sí, agachar la cabeza y quedarme callado es algo que he aprendido, por más que me cueste hacerlo. Sin embargo todo tiene su límite, y no es que sienta que han abusado de mi persona, sino que todo tiene sus límites, y los míos ya llegaron, para bien o para mal. Me da lástima, porque increíblemente le he cogido un cariño peculiar a la institución y con quienes trabajo, seres que lamentablemente tras mi partida no podré frecuentar -salvo que terminen su ciclo, y para eso falta-. Me encuentro en una buena situación laboralmente hablando, me han ofrecido un ascenso, el cual supone una descarga de trabajo para mí, es decir, que lleve un trabajo más suave (eso no dice que tenga un rango menor), con el título de "asesor", y sólo tenga que aconsejar a quienes suben a los puestos que yo ya he pasado de óptima manera. Yo estaría, igual, por encima. Pero no es la clase de trabajo que yo necesito actualmente, yo debo de estar más ocupado, además por mucho tiempo me he entragado al 100% a esta empresa, dejando de lado muchos problemas y cuestiones personales pendientes que dejé de la nada tras mi sorpresivo ingreso aquí, y, ahora, habiendo concluído yo mis metas, deseo cesar el trabajo y luchar por lo que dejé fuera. Ya es mi hora, tanto tiempo sin saber nada de mis seres queridos (uno de los gajes del oficio), sólo preocupándome por lo que sucede acá. Ya es demasiado sacrificio. Ya llego, redundo, mi hora, y como bien dicen "nadie es indispensable", así que yo sé que tendré sucesores que llevarán la dinámica de la empresa tan o mejor como yo la llevé, porque yo los acompañé cuando ellos fueron creciendo y los traté de inculcar de lo mejor posible. Con mucho respeto, me despido de esta empresa; así como vine: de sorpresa. Espero que lo tomen a bien, yo ya debo lidiar por lo que realmente deseo. Adiós y gracias.

jueves, 17 de diciembre de 2009

Trayecto

El autor del escrito sale de la tienda y se sienta en una banca del parque Keneddy, mirando "La Casita", escucha un set de Ricardo Villalobos para una radio italiana, prende un cigarrillos y cruza las piernas. Mira el paisaje y se le vienen algunas ideas a la cabeza, saca su libreta de apuntes que le regaló el día de ayer su madre y toma nota de lo siguiente:

"La maldita desesperación de no encontrarla,
y el ya aburrido y cansino sabor a tabaco.
El fastidio de ser controlado,
y la inconformidad de tener vacío el bolsillo.
Las ganas de vivir en un depa rentado,
peor todavía esperando que me llamen de algún trabajo.
Aún no disfruto la sensación de ser libre,
no tengo ni cel para estar comunicado.
No puedo divertirme, sólo resignarme.
¿Hasta cuándo va a durar esta situación?
¿Cuánto más tengo que esperar?
Los versos de mierda que me salen iguales, no tengo nada de auténtico.
¿De qué me sirve escribir?
Si no la puedo conseguir.
Estoy perdido"

El autor se siente, en sus últimas líneas, confundido y menospreciado, recuerda la canción de "The Dirty Mac - Yer Blues" porque en un párrafo dicen que ya ni su rock'n' roll los satisface porque ya no tienen a su amada, le sucede lo similar pero con los escritos. Espera que termine el set de media hora, en ese tiempo ve a varias personas pasar por Miraflores, siempre tan excéntricas. Busca a su madre en Ripley pero no la encuentra, va a Saga y tampoco la encuentra, no quería buscar ropa pero lo hace, se da una vuelta por la sección zapatillas porque son, en cuanto a vestimenta se refiere, lo que más le agrada y toma importancia. No encuentra las Reef, pero ve unas Puma elegantes, sigue dando vueltas y ahora sí encuentra unas Reef agradables. Si tuviese el dinero se las compraría, desea que su madre acceda a comprárselas. Depender de, eso es lo que le hostiga. La libertad que tenía antes ha sido censurada, está bajo estricto control y eso es lo que más le desespera. Se autoanaliza, quiere encontrar el por qué de su estado de ánimo. Está insatisfecho porque no tiene lo que quiere, porque el adicto se frustra cuando no consigue lo que desea, porque es intolerante ante las frustraciones, porque es inmediatista. Sabe todo en teoría, se da cuenta, pero ahí nomás, entonces, ¿dónde queda la práctica de lo aprendido durante tanto tiempo? Sin más esperanzas sale y se regresa. Opta por tomar el camino de Larco, hace meses que no regresa a casa a pie por ahí. Pasa por varios lugares y algunos despiertan recuerdos dentro de él. Piensa en muchas cosas, en su blog, verbigracia, hace un recorrido mental y encuentra que ya no hay "Ocurrencias", que ha perdido el sentido del humor, y que ya no hay textos de rebeldía; la llama se le ha apagado. Extraña a su antiguo "yo", pero sabe que el actual no debe desmoronarlo. Piensa en rendirse, es inexperto en el campo del amor, no sabe qué hacer, si darse a un lado o si seguir batallando, quizá esperar hasta los setenta años, a lo Fiorentino Arizza. No se percata que tiene que dejar que las cosas vengan por sí mismas, no se percata que quiere todo de una vez, no se percata que tiene que rezar "La Serenidad". A mitad de camino, cruzando el puente que une Miraflores de Barranco, puente que caminó innumerable veces con ella, ve un afiche de "Midnite", concierto que, de hecho, en el tiempo de reclusión, se perdió, como tantos otros, en fin, el afiche lo hace vacilar, tal vez el estilo de música que escucha lo esté aturdiendo y no lo esté ayudando a calmarse; entonces cambia a "Richie Hawtin (dios) @DEMF 2007" por "Midnite" con "Weed Burn", "Mighty Race" y más. Fue una buena decisión, el reggaesito tiene otra vibra. Pasa frente a lo que antes era la Lagunita, y se mete por la Av. El Sol. Gente vestida de fiesta transita por las calles: es jueves. Es jueves y él está caminando como un huevón cavilando en cosas sin sentido y solución y se siente impotente, una vez más, de no poder tener la libertad de antes. Ni siquiera tiene llave para abrir la puerta, va a tener que ir a alquilar cabina esperando a que su madre llegue, porque, calculando por la hora y conociéndola, sabe que de todas maneras siguen metidos en los escurridizos y laberintosos pasajes de las tiendas chilenas que han establecido casi un monopolio de malls en el Perú. Ha sido un largo recorrido, le gustó ver ciertas calles otra vez, se sorprendió frente ciertas remodelaciones, siguió, simplemente, su camino. Quiere llegar a casa y tomar su sedante-hipnótico, su antisicótico y su estabilizador de ánimo, pero recuerda una vez más que mamá no está en casa, y lo comprueba. Se va a internet, a perder el tiempo. A perder el tiempo, a perder el tiempo....

Recuerdos/Olvidos

¿Quién no va a olvidar a la "U" dando la vuelta olímpica en el Estadio Nacional después de haberle ganado en penales al Cristal en el año 1998 teniendo 10 u 11 años de edad?

¿Quién no va a olvidar a James Zabiela sacando "KLF at THe Rave - What time is love?" a las 5 a.m. en Villa?

¿Quién no va a olvidar a Desyn Masiello en Joia con la primera roleada en serio de tu vida?

¿Quién no va a olvidar a Richie Hawtin derritiendo las paredes de Gótica con su estridente y esquizofrénica melodía?

¿Quién no va a olvidar ver a Cattaneo y Digweed, dinosaurios e ídolos del House cediéndose la posta y cambiando de track juntos?

Pero yo prefiero cambiar todos esos recuerdos ficticios por uno solo: El Tuyo.

El día en que te conocí, el día del primer beso -siete días después-, el día que estuvimos -ese mismo día-, y nuestro día -casi seis meses después-.

Por más que me pese y me sienta culpable y derrotado -inmensamente derrotado, embarrado en el fango- aun así, yo prefiero ese recuerdo, el tuyo, porque es el que me hizo, dentro de nuestras cosas, el más feliz y dichoso sobre la tierra. Tu recuerdo, y el de nadie más, porque fue el que me llevo a ser quien soy, porque fue una etapa en la cual -con mis malditos errores- aprendí, y mucho.

Tu recuerdo, grabado en mi cuerpo y en mi mundo entero. A donde quiera que vaya... jamás se desvanecerá.


martes, 15 de diciembre de 2009

Sentado a la ventana

El cigarrillo sabe amargo: a derrota, a frustración, a cólera. En vano fuma sentado en el brazo del sillón, al lado de la ventana; el humo que bota igual regresa a la sala, contaminándola no de nicotina ni de alquitrán, sino de los sentimientos negativos ya citados. Ve el tránsito mas no lo escucha -por suerte- ¿Por qué James Zabiela, siendo un Dj tan bueno y con una performance casi impecable en vivo, es tan aburrido cuando saca sets para la radio? Un agregado más para el pensamiento. ¿Qué hizo mal? Las cosas estaban llendo más o menos, de manera aceptable por así decirlo, pero ¿ahora? El panorama ha cambiado, se ha trastocado. Las impresiones ya no son las mismas de cuando regresó -de alegría, de regocijo, de felicidad-, tal vez porque no son más que eso: impresiones. La realidad es otra. No sabe qué hacer, quizo obrar bien, ser leal, pero ¿se le habrá pasado la mano? ¿se pasó de atrevido? Erró al creer que así debía ser sólo porque en el pasado no lo había sido. Seguir al corazón es difícil, se da cuenta. No sabe cómo proceder, si retirarse o si insistir; si tan sólo supiera qué es lo que ella quiere..."Reparar el daño causado excepto que cuando al hacerlo perjudicara a nosotros mismos o a los demás", decía el octavo paso. Complicado entenderlo. Le consta que él es frágil, sabe de su fragilidad, conoce su realidad. Tiene mucho que pensar y ahí está el problema: Pensar. ¿Dónde quedó la historia de ellos dos, en un libro cuyas páginas ya no se deben repasar? "Las cosas han cambiado", le advertían antes que regrese, pero él no las tomó tan en serio, sin embargo, tenían razón, y cada vez que chocaba contra algo les daba la razón y no se lamentaba de su determinación, porque una mujer en su pasado (la mejor mujer) le dijo una vez que no le gustaban los hombres que se arrepèntían, entonces sólo chasqueaba los dientes y seguía adelante, tratando de no perder las fuerzas. Tira el cigarrillo por la ventana -qué rápido lo fuma- con fuerza y se sienta a escribir, algo bueno, al menos, debe salir.

domingo, 13 de diciembre de 2009

Respuestas del Corazón


Caminaba como siempre por las calles: pensando. Pensando en ella. ¿En quién más podría pensar? Entonces, como suele suceder (y lo recalco siempre) en el universo, pasó uno de esos acontecimientos que se juntan con el fin de darle una respuesta a un humano. Pensaba yo en qué era lo qué sentía por ella, qué era lo qué quería, qué debía de hacer... fue ahí cuando me topé con un slogan que dice CH encerrado en un corazón, que supuestamente es el "Chapulín Colorado". El universo es misterioso y no te da las respuestas así por así, hay que saber interpretarlas, hay que ser hábil para entender al universo, y yo lo fui. Ese C.H. son las siglas de su nombre y de su apellido, por los cuales la conocí, y el corazón en que están enceradas representa lo que yo todavía siento por ella: amor. Seguí caminando, aunque sin seguir sin pistas y con ya un intento fraudulento pero entusiasmo y con mentalidad positiva, puesto que sé que de lo contrario no obtendré lo que tanto busco. No me dejaré derrumbar por más obstáculos que encuentre. El universo ya me lo dijo y eso hora de que siga los impulsos de mi corazón, yauan vez fallé e hice todo lo que no debía, pero estoy dispuesto a reparar el daño causado y terminar lo que nunca se terminó, porque las cosas no quedaron como debían: en una verdadera amistad.

viernes, 11 de diciembre de 2009

Faltaba algo

Regresé después de tiempo y vi que:
¡Faltaba algo!

No eran los afiches de la pared,
no era el color antiguo de la pared,
no era el orden (desorden) en el que dejé el cuarto,
no era el dvd,
no era el humo emposado,
no eran las colillas en el cenicero,
no era el olor a cannabis,

¡Eras tú!
Cuya esencia permanece indeleble
dentro de estas cuatro paredes,
tú,
que estás y no estás,
que dejaste tu aroma
pero te llevaste lo palpable,
tú,
presencia inmmemorable,
huella y rastro en mi vida.

miércoles, 2 de diciembre de 2009

De viajes

A Diego y Gabriela


-Hey viejo, otro viaje -sentenció. -Habla.

Lo miró. ¿Estaba para otro viaje? No olvidó los viajes ni lo0s sacó de sus planes, pero ¿era el momento indicado? Pensó, y mucho. Quería y n quería un viaje, simultáneamente. No sabía ni sería lo mejor. Después de tiempo, tomar la decisión de viajar no era así de simple. La verdad es que temía. En su vida los viajes fueron placenteras y exquisitas experiencias, pero el tiempo pasó y nueva información filtró su cerebro, las que podían impedirle tener uno bueno. Sabía los riesgos que correría: de no resultar óptimo las respuestas serían desastrozas -sin exagerar- y podrían mermarlo y hasta traumarlo, pensaba. Entonces: ¿cuándo iba a ser el tiempo? Porque tarde o temprano lo tendría que hacer, no podía olvidar su identidad de viajero interdimensional por excelencia. Dos bandas batallando en su cabeza. Tenía que esperar un detonante, una excusa para perdonarse de hacerlo de nuevo. Y tenía ansías de que suceda. Pero ¿y cómo iba a resolver este instante? ¿Que iría a responder? Estaban su amigo y él, sentados cara a cara, el ruido de la música no importaba, ellos son los protagonistas.

-No lo sé -contestó -, tengo muchas dudas.

Su amigo -del cual no sabemos su nombre- no lo condenó ni le insistió, sólo se quedó atónito y se sintió, bueno, algo triste. Triste porque pensó que su gran compañero no era el mismo de antes y que, a causa de eso, se privarían de espectaculares momentos compartidos, como los que tuvieron en el pasado. Pero lo estimaba y consideraba mucho como persona y lo respetaba, así que no podía, aunque quisiera, manipularlo, su decisión era su decisión y listo.

Elías, por su parte, se quedó callado y sumergido en su propio mundo. Sentía que se defraudaba y, por ende, también a su amigo. Eso sentía, mas no necesariamente era lo correcto. Pensó -al igual que lo había pensado ya su compañero, y tal vez con acierto- que ya no era el mismo de siempre y se atormentó con la idea. Desprendido de su esencia, careciente de su sustancia. No lo quedaba de otra; primero era él. Un aliento -divino, quizá- le devolvió el ánimo. En el hoy no sería preciso, pero si probablemente en un mañana, que ojalá tan lejos no se encontrara. Pasaba por una etapa y una vez concluída ésta vendrían más, propicias para lo que quería y anhelaba. Su mañana no le correspondía, no había de qué preocuparse, porque justo en el momento recibió una palmada en el hombro que lo distrajo de sus cavilaciones y del juego y escuchó a su amigo decirle:

-No hay problema. La vida nos dará muchas cosas más. Nuestra amistad seguirá.

Sonrió, porque la vida le otorgaba esperanza.

domingo, 29 de noviembre de 2009

Despierta YA

El terrible temor de perder la batalla, incesante.

La maldita indecisión de no saber a qué bando pertenecer.


Tener hambre de guerra y agallas, pero no saber cómo usarlas.


El futuro incierto...

Y el pasado agobiante...


Amigos o enemigos... de eso nunca se sabe.


Norte, Sur, Este, Oeste,

las brújulas igual apuntan hacia mí.


La revolución que corrre por mis venas

y la determinación de seguirla, palpable.


La guerra comienza.


Despierta ya, Soldado!

que en el campo de batalla te están esperando


viernes, 27 de noviembre de 2009

Visiones

He estado chekeando en menos de un minuto -porque con más no cuento- y veo que la mayoría de los blogs que tenía afiliados no escriben hace tiempo, es una pena porque tiempo (oh! tiempo) para darle un vistazo rápido a todo lo que han escrito no tengo. Tiempo para escribir algo que he escrito... tendré. Por el momento, basta con esto. Todo llega a su debido momento, prometo algún texto para la próxima semana. Oh! Mi Tren! Cuánto tiempo lo descuidé!

miércoles, 25 de noviembre de 2009

El regreso

Me verán volver

en la ciudad de la furia.


Ya nos leemos, queridos lectores, espero no se hayan olvidado del vgababundo, un espíritu latente.

martes, 13 de enero de 2009

El día de San Canuto



Y vale, que coincidencia que también es el día de San Canuto. Vale, por las puras no son las cosas. Todo tiene relación, todo. Ya sé, pues, porque soy así. San Canuto es el patrón de todos los consumidores de cannabis. Era un vikingo convertido al cristianismo pero ahora es el defensor de los fumetas, imagino que debe d eestar contento porque vaya que conversión para más importante le tocó, ser el representante de una comunidad fumeke no es juego ni algo trivial, es un rol muyyy importante. jaja. Ya saben, el 19 a prender sus dubis nomás. Y vaya coincidencia carajo... jajaja.



¡Ahora ya sé a quien prendérle mis velitas! ¡Amén!

Momentos


En un momento de la vida...!
Dejé la lucidez para habituarme a una vida stone.

En un momento de la vida...!
Dejé la religión para ser partidario del agnosticismo.

En un momento de la vida...!
Dejé de comprarme cosas de marca para interesarme en mejorar pero mi calidad como persona.

En un momento de la vida...!
Dejé de leer historias para escribir las mías mismas.

En un momento de la vida...!
Cambié de gustos musicales porque había que explorar más y ser más profundo.

En un momento de la vida...!
Dejé de tomarle importante a las normas sociales para enfocar más los intereses individuales.

En un momento de la vida..!
Dejé de rocordarte para empezar a olvidarte.

En un momento de la vida...!
Dejé por completo de amar para sólo odiar.

En un momento de la vida...!
Dejé de ser una buena persona para ser un cretino.

En un momento de la vida... :
Todo puede cambiar,
para bien,
o para mal,
para mí:
para mal.

miércoles, 7 de enero de 2009

María Mía

María mía,

tú que me haces compañía

día a día

tú que estás

en los triunfos y

en las caídas,

que me relajas por la tarde

y me haces reir de tonterías

tú que enseñas el mundo

como un todo lleno de sabiduría

tú que eres fruto de la tierra,

de dios, eres

parte de mí,

y también de la creación.