jueves, 20 de septiembre de 2007

El MP4 y la tecnología


Caminar siempre ha sido uno de mis hobbies favoritos (si no es el favorito), pero desde hace un tiempo noto agobiante practicar dicho entretenimiento. Y es que caminar no es solo mover los pies y las manos y de vez en cuando voltear el cuello a la derecha o izquierda a ver si acomete algún auto o si algún transeúnte osa cruzar tu camino, sino que es también mantener el cerebro activo y pensar. Y es ahí donde yo encuentro mi problema: en pensar. Jaja, sí, en algo tan simple..,.y tan complejo. Es que pensar es sumergirse en un mundo de ideas y probabilidades, de recuerdos y proyectos, de olvidos y de memorias, de melodías que se quedan grabadas en la cabeza, de flashbacks de la era en la que yo era el Rey. He descrito una serie de sucesos que ocurren en el acto de pensar y quizá sigan encontrándolo algo inofensivo, pero estoy seguro que gran parte de mis lectores comprenderá mi punto de vista. Pero lo más grato de todo y a lo que iba en este relato es a que para suerte de quienes caminar a veces se torna en un remolino de pensamientos insoportables se han inventado nuevos dispositivos para escuchar música mucho más útiles que los antiquísimos walkmans y discmans, y el invento del que hablo es el MP4 y el MP3. El segundo de ellos salió en primera opción, causó revolución y tenía razones para hacerlo: te evitaba la gran molestia de cargar una grande consola dentro de un canguro, la mochila, o el bolso para las mujeres y de cargar además los discos que tenías planeado escuchar, a esto se le sumaba que las pilas ya no se gastarían tan rápido como en una lectora que debe estar todo el tiempo girando y girando para poder emitir los sonidos. Pero el MP3 todavía tenía algo... y es que aún usaba pilas... luego se inventaron MP3 con más capacidad, empezando desde los 128mb hasta llegar a la giga y más. Pero eso de la giga y más ya no es mérito del MP3, sino del MP4, reproductor portátil que también permite almacenar videos en formatos wmv (y unos más pesados: avi), y almacenar demás información dando la impresión de ser una mini ipod; para remate posee la función de almacenamiento extra, poseyendo una ranura donde puedes insertar mini tarjetas usb que permitirán ampliar la memoria de tu consola. Yo soy un avaro y no me gusta gastar más que en mi cerebro, y consideré que para él lo más saludable era que me compre un reproductor de música y libere a mi cabeza de tener que dar miles de vueltas a las ideas, de confundirse y de hastiarse para que ahora solo disfrute de la rica música que día a día me voy bajando.

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